La gran sequía que está afectando a todo el territorio nacional llega al Bajo/Baix Cinca y obliga a suspender la prueba para garantizar la integridad física de todos los participantes, tanto en la modalidad competitiva como en la modalidad popular.
El comité organizador del Descenso Internacional del Cinca, respaldado por informes negativos de los equipos y cuerpos de seguridad, y apoyado por clubs y federaciones implicadas en la competición, ha decidido cancelar el XXIV Descenso Internacional del Cinca, debido al bajo caudal del río Cinca a su paso por las localidades de Fraga y Torrente de Cinca, y su llegada a Mequinenza. La decisión ha sido trasladada esta mañana en la rueda de prensa a la que han asistido el presidente de la Comarca del Bajo/Baix Cinca, Marco Ibarz, la vicepresidenta de la Comarca del Bajo/Baix Cinca y consejera de deportes del Ayuntamiento de Mequinenza, Débora Bravo, el alcalde de Fraga, Santiago Burgos, el teniente alcalde de Torrente de Cinca Francisco Cervelló y el consejero de deportes de la Comarca del Bajo/Baix Cinca, Héctor Alonso.
Marco Ibarz, presidente de la Comarca del Bajo/Baix Cinca ha mostrado su tristeza por tener que tomar esta difícil decisión “muy a pesar nuestros, y aconsejados por los cuerpos de seguridad y demás entidades, clubs y expertos, hemos tenido que tomar la difícil decisión de cancelar el XXIV Descenso Internacional del Cinca, ya que, a causa del bajo caudal, consecuencia de la extrema situación de sequía que está sufriendo nuestro país, no podemos garantizar ni el buen funcionamiento de la prueba, ni la integridad física de los participantes.” Ibarz ha agradecido a los Ayuntamiento implicados el apoyo a la decisión tomada y el respaldo en estos momento.
Héctor Alonso, consejero de deportes de la entidad ha asegurado que ha sido una decisión muy estudiada, muy debatida entre todos los implicados, que no se ha tomado a la ligera, y que hasta el último momento se ha mantenido la esperanza de poder seguir adelante, pero al final se ha tenido que suspender por el bien de todos. A su vez, ha agradecido el gran trabajo realizado por los distintos cuerpos, y la voluntad y predisposición con la que se ha afrontado, “no hemos tenido claro hasta hace pocas horas la suspensión, pues todos queremos que el Descenso se celebre, pero al final no ha podido ser”.
Por otro lado, Alonso ha indicado que se van a suspender algunas de las actividades paralelas englobadas en el marco de la prueba:
- Trofeo nacional de pista jóvenes promesas
- Circuito nacional de paracanoe
- Campaña de sensibilización de hábitos deportivos
- Salida BTT
- Salida Atlética
- Campaña de protección de rayos solares
- Calentamiento popular de aerobic
- Fiesta de la espuma
- Jornada Piragüismo para todos
- Rally fotográfico
- Concurso de atuendo
- Animación charanga.
Las demás actividades del programa se mantendrán.
Alonso ha indicado que la semana que viene se van a habilitar los canales para la devolución de las cuotas de los inscritos.
Tanto Santiago Burgos, alcalde de Fraga, como Débora Bravo y Francisco Cervelló en representación de los Ayuntamientos de Mequinenza y Torrente de Cinca respectivamente, han apoyado de forma explícita la decisión tomada, pues entienden que el problema es importante y hace peligrar la integridad de los participantes.
En la última reunión de seguridad mantenida el pasado 10 de agosto en la que participaron bomberos de la Diputación de Huesca y de la Diputación de Zaragoza, agentes de la guardia civil y la guardia civil de tráfico, policía local de Fraga, agentes de la protección de la naturaleza, protección civil de la Comarca del Bajo/Baix Cinca y bomberos del Sercat, se puso de manifiesto el mal estado del río en todo su recorrido, debido al bajo caudal.
En la misma, agentes de los cuerpos de bomberos mostraron imágenes grabadas con un dron de esa misma mañana, donde se podía comprobar la proliferación de algas a causa de las altas temperaturas, y la gran cantidad de piedras que han quedado al descubierto por el bajo nivel de agua, así como algunas modificaciones en el recorrido del cauce del río.
Los responsables de la inspección informaron en ese momento que el caudal se encontraba a 4 metros cúbicos, una cantidad de agua que resulta insuficiente para que el río genere corriente y arrastrar las embarcaciones de la modalidad popular, lo que implicaría que los participantes tendrían que hacer un gran esfuerzo para navegar. Al bajar en caudal, afloran piedras que hacen peligrar la integridad de los palistas y de las piraguas, pues es fácil que se puedan romper o algún piragüista pueda dañarse al hacer porteo en el cauce.
Se pudo comprobar que en los tramos en los que hay saltos, actualmente no se pueden realizar con la piragua, y se tiene que bajar de ella, con la peligrosidad que conlleva al sobrepasarlo, pues se puede quedar atrapado en los remolinos que allí se generan.
Según el cuerpo de bomberos que realizó la inspección, las zonas de riesgo han aumentado en todo el recorrido, habrá muchas las zonas de porteo en las que deberán bajar de las piraguas, lo que provocará agotamiento en los participantes y su posterior abandono. El esfuerzo que deberán hacer los participantes remando será mayúsculo, pues sin corriente, no se podrán desplazar.
Desde la entidad comarcal y el comité organizador del Descenso, se solicitó el lunes día 8 de agosto a la Confederación Hidrográfica del Ebro que se estudiara la posibilidad de liberar agua de los embalses superiores, a lo que la Confederación contestó declinando la solicitud, a causa de la grave situación de sequía que está sufriendo todo el país.
El espíritu del Descenso se ve comprometido y según los expertos, se intuye que no va a ser una jornada de diversión, sino más bien de peligro y sufrimiento.
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